domingo, 13 de marzo de 2011

Periodismo o SOBRE REACCION noticiosa.

Primero quiero decir que las autoridades de la Isla y las instituciones se portaron a la altura de las cirscuntancias y todo el proceso vivido este pasado viernes en la alerta de Tsunami tuvo orden y claridad.

Aquí, no hubo desorden y toda la población residente respetó y se protegió de adecuada manera. 

Algunos subiendo a casa de parientes, otros en la alturas para visualizar el fenómeno y en su mayoría los turistas acampando cerca del aeropuerto como medida preventiva.

No puedo decir lo mismo de aquellos que en Santiago sometieron a todos nuestros seres queridos a una suerte de terror noticioso, con noticias que lejos de dar tranquilidad solo inquietaron e hicieron pensar las peores cosas.


Yo no sé porque le hacen tan mal a su profesión, pues con tal de vender pueden decir y hacer cualquier cosa, sin reparar en el daño emocional de aquellos que escuchando y viendo los informes lloraban y se preocupaban con justa razón.


Bien sabemos que la naturaleza es impredecible y que por supuesto hay que tomar precauciones, pero dar horas y horas noticias alarmantes es solo fruto de mentes editoriales muy desquiciadas por obtener rating.

Señores editores de medios televisivos, de prensa y radio apliquen un poco de criterio y para la próxima informen con lealtad y profesionalismo.


Aqui les muestro una vista de la recogida del mar en la playa Pea a las 7.30 de la tarde mas menos metro y medio, pero sin consecuencias cuando el mar volvió a la realidad que pueden ver en la otra vista en el cual los botes de la caleta no alcanzan a llegar al borde mismo.


Esto fue lo que pasó en Hanga Roa, ni más ni menos.

Todos estamos agradecidos de que la naturaleza nos tratara con piedad, pero no estamos agradecidos de aquellos que usufructuaron con la noticia dejando a nuestros seres queridos con el corazón apretado y con la angustia de pensar que nos podrían perder.