Nota aparecida en http://www.veoverde.com/
El tema es el siguiente:
Desde hace algunos años uno de los principales problemas que enfrentan las marcas de bebidas son los desechos generados por los envases de plástico PET. El auge del consumo de aguas saborizadas y gaseosas crea una gran masa de envases desechables difícil de manejar. Para hacer frente a este tipo de desechos, las grandes embotelladoras están empezando a buscar formas alternativas de lidiar con este desperdicio, reduciendo la huella de carbono del producto y sacarle algo de provecho al residuo.
Desde hace un tiempo que vemos cómo diferentes diseñadores se están valiendo de las botellas PET desechadas para hacer objetos de decoración y para construir viviendas. Por su parte, los fabricantes de gaseosas también están tomando sus propias medidas, están instalando plantas de reciclado dedicadas exclusivamente a recuperar el plástico de estas botellas desechadas. Pero no todo es tan aburrido como esto. Coca Cola Company ejercitó un poco el ingenio y convocó a la firma de diseño Emeco para que desarrolle una silla con el material de descarte de las botellas de plástico y también la hay para latas de aluminio.
Un diseño simple, claro, elegante y multiuso. El modelo se llama 111 Navy Chair y como su nombre lo indica, requiere ese número de botellas plásticas para su confección. Una idea muy interesante y con estilo.